Cuando todo está inventado


Alguna vez, el reconocido teórico de la comunicación, Paul Watzlawick dijo: “Cuanto más se cambia, más sigue siendo todo lo mismo”. Quizás, esta reflexión podría resumir lo que el mundo de los negocios atraviesa hoy en materia de innovación. Incluso, dentro del marco de las soluciones de tecnología informática, muchos profesionales ya sostienen que todo lo que se presenta como innovación no es más que una copia renovada de algo anterior.

Actualmente, el mejoramiento permanente de las empresas está condicionado por dos grandes factores: la inversión y la innovación. El primer componente depende, en parte, de la experiencia y el conocimiento del negocio de quienes toman este tipo de decisiones. El segundo, en cambio, es el resultado del trabajo de las personas que se dedican a pensar, crear e implementar lo que aún no existe.

Hoy, la misión de innovar se enfrenta a la presunción generalizada de que todo está inventado y que, por lo tanto, lo nuevo no es más que una copia mejorada de lo anterior. Según este pensamiento, las empresas están limitadas por las herramientas que ya utilizan y su forma de operar difícilmente logre superar los modelos heredados -salvo modificaciones menores-. Eduardo Kirchuk, CEO de Red Plataforma, discrepa con esta idea y sostiene: “Es verdad que los procesos de innovación están sujetos a las situaciones iniciales de la empresa, pero también dependen de su capacidad de observar, transformar y aplicar cambios que puedan adaptarse a situaciones de distinta naturaleza”.

Cada día se lanzan al mercado nuevos productos y servicios que intentan romper con esta presunción de lo renovado y que evidencian, además, que dentro de las propias organizaciones pueden coexistir la innovación y este tipo de pensamiento. “Un ejemplo concreto de innovación es la tecnología aplicada a la medicina, el turismo, y la seguridad”, señala Diego Erben, Director de la División ERP de Infogestión Bracht S.A. Y agrega: “Es indudable que la innovación es parte de la superación constante del ser humano, pero para lograrla debe crecer y superar objetivos que, muchas veces, son difíciles de alcanzar o chocan con ideas más conservadoras”.

¿Dónde está la dificultad para innovar? Muchas empresas señalan a la evolución permanente del mundo tecnológico como a uno de los principales condicionantes a la hora de hacerlo. “Cada producto informático que se incorpora al mercado –sea nuevo o novedoso- contribuye a la innovación de todas las soluciones de tecnología informática”, opina Antonio Galván, Titular de A.G. Soluciones Informáticas (AGSI). Cuando autores como Bill Gates comparan a la tecnología digital con el sistema nervioso humano, también se desprende la idea de que cada creación o modificación dentro del mismo, supone una evolución y un proceso de innovación generalizado. “Sin embargo -agrega Galván- lo alarmante es que incluso mediante esta lógica, resultan ser muy pocas las empresas que invierten en la mejora continua”.

Cómo innovar hoy

Según Eduardo Kirchuk, para lograrlo “se debe incorporar algún paradigma nuevo como elemento diferencial. Ver y evaluar lo que los otros hacen, y extraer ideas en base a la comparación con ellos, no debe entenderse como el simple acto de copiar. Se trata, en realidad, del impulso necesario para realizar las mejoras y los cambios que generen el mayor valor agregado posible”. Y sentencia: “Quienes consideren a la copia una garantía del éxito terminarán, indefectiblemente,  perdidos o dispersos ante el ojo del mercado”.

En esta línea, el grado de innovación depende de la capacidad que la organización tenga para visualizar lo propio, observar lo que los otros hacen, conocer, y diseñar soluciones eficientes que refuercen la identidad de la empresa. “La innovación nos permite llevar adelante una mejora continua y trabajar en la calidad y el crecimiento de cada uno de nuestros clientes y aliados”, añade Erben acerca del beneficio de innovar en soluciones informáticas.

Tal vez parezca que todo ya ha sido pensado y creado. No obstante, cada paso, por más pequeño que sea, presenta infinitas posibilidades de mejora que cambian la forma del trabajo con el cliente y que actúan, no sólo como factor diferenciador sino que, también, suman valor a sus procesos de negocios.    

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